¡Teatro solidario, doblemente bueno y gratificante! Tras la intensa experiencia que supuso, a principios de verano, su primera visita en un centro penitenciario, para representar una obra de teatro para los presos, concretamente en la cárcel de Can Brians-2, y que dejó igualmente complacidas en todas las partes, ¡la Teatral repitió!
En esta ocasión, a finales de verano, la sección aceptó la invitación de los responsables del centro penitenciario Can Brians-1, para representar la obra ‘El señor de las bicis’, la misma que habían llevado al centro gemelo. De hecho, están situados uno al lado del otro, en el término municipal de Sant Esteve Sesrovires (Barcelona).
Público entregado
“Sencillamente ‘piel de gallina’; ha sido muy emocionante, increíble”, explica una de las componentes del elenco barcelonés, que esta vez actuó ante un público mixto, de presos y presas, que siguieron con mucho interés la representación.
Al final de la obra, el público ovacionó largamente a los componentes de la Teatral, visiblemente emocionados. “Los educadores del centro, nos han felicitado´, ya que había sido evidente que conectamos con los internos y las internas”.
Una obra que funciona
‘El señor de las bicis’, una amable contemplación de los problemas y contradicciones existenciales que van apareciendo con el inexorable paso de los años y el sentimiento lógico de resistencia a hacerse viejo.
El relato es obra de Fidel Rodríguez es, también, una especie de reivindicación del derecho de toda persona a rehacer, reorientar o relanzar su vida sentimental, prescindiendo de la opinión u oposición de sus hijos, familiares y amigos.
Teatro inclusivo
Hay que añadir que, todas las representaciones de la Teatral se rigen por el principio de ‘teatro inclusivo’, lo que implica que, en este caso, uno de los actores que forma parte del reparto tiene Síndrome de Asperger.
¡La Teatral lo ha vuelto a hacer! ¡Enhorabuena!