Història Barcelona, con Roser Pàez al frente, organizó una nueva conferencia con la profesora Carmina Vivas. Una oportunidad para conocer y analizar la vida y obra de este pintor que utilizó la naturaleza como referente sensorial y supo dotarla de un carácter trascendental. Paisajes aún reconocibles y que se pueden encontrar en las tierras de Antepomerania que rodean Greifswald, ciudad que vio nacer al pintor el 5 de septiembre de 1774. Antepomerania pertenecía en aquel momento a la corona sueca, pasó a manos de Prusia. Actualmente pertenece a Alemania, asomada al Báltico en el noreste del país, próxima a la frontera de Polonia.
Friedrich estudió en la Real Academia de Bellas Artes de Dinamarca, por entonces una de las academias más modernas de la època. A pesar de pintar vaciados de yeso de esculturas clásicas, se formó más como dibujante que como pintor.
Durante la sesión analizamos algunas de sus pinturas, especialmente la titulada “El caminante sobre el mar de niebla”, una de las obras maestras del romanticismo. Un caminante de espaldas, que intenta diluir el individuo en el “todo cósmico”. Una forma de atraer al espectador al interior del cuadro, colocándolo en el mismo lugar de la figura para permitirnos apreciar el fenómeno natural, con tal maestría que la fisonomía del personaje no distraiga la atención del paisaje. Otras pinturas, cuyo tema es la Isla de Rügen, donde el pintor percibió la grandosidad del paisaje, dibujando y pintando sus extensos prados, campos de colza y las solitarias playas de arena blanca, asomadas a una costa escarpada. Dichos elementos ofrecían al pintor un recurso compositivo donde expresar sus estados de ánimo.
Educado según la confesión protestante de su familia, pasó a ser un librepensador en su etapa adulta. La muerte de familiares cercanos a lo largo de su infancia le indujeron la condicion introspectiva y depresiva de Friedrich, que sin duda le influenciaron en la composición de sus obras.
Carmina también nos comparó la obra de otro artista, René Magritte (surrealismo), que se asemeja a él en la utilización de figuras que, o bien se muestran de espaldas, o bien carentes de rostro.
Una oportunidad única para adentrarnos en el trabajo de este artista sobre el cual, el año pasado, con motivo de la celebración de 250 aniversario de su nacimiento, se organizó una monumental exposición en la ciudad de Berlín.