La sección de Història de Barcelona, con Roser Páez al frente, continua con el ciclo propuesto por la profesora Carmina Vivas, en relación con las “Las grandes artistas olvidadas”. El 27 de febrero, la sesión se dedicó a la pintora Artemisa Gentileschi (Roma 1593 – Nápoles 1656).

Sin duda fue una de las artistas italianas más importantes del siglo XVII. Creció en una familia rodeada de pintores y escultores a finales del Renacimiento. A los 16 años decide hacerse aprendiz de su padre, Horacio. Orgulloso y consciente de que ella era mejor que él y el resto de los pintores de su época en Roma, accede a darle nociones académicas.

Los primeros años de su obra son pinturas amables, cálidas y de unas tonalidades que nos transportan a la escuela veneciana: Tintoretto, Veronese, Tiziano, entre otros. Desgraciadamente, un hecho trágico en su vida (una agresión sexual por parte de uno de sus maestros) hará cambiar el cromatismo y los temas de sus obras, que serán más oscuras y violentas, al más puro estilo caravaggista. Durante la sesión, tuvieron la oportunidad de visualizar algunas de sus obras más sorprendentes dotadas de un gran dramatismo, como las tituladas: “Susana y los viejos”, “Autorretrato como mártir”, “Judit decapitando a Holofernes” o “Lucrecia” (géneros inadecuados para el espíritu femenino de aquella época).

Reconocida posteriormente, fue la primera mujer en hacerse miembro de la Accademia delle Arti del Disegno de Florencia, y obtuvo una importante clientela internacional. Trabajó bajo los auspicios de Cosme II de Médici.

¡Una sesión inolvidable para todos los asistentes!